Las vocales se distinguen por:
i: la localización (de la articulación) o el timbre (color).
ii: el grado de abertura o la densidad o difusión (acústica) .
iii: la nasalidad que da una resonancia suplementaria
Los 'sistemas vocálicos' pueden ser lineales si es que se reconocen diferentes grados de abertura o densidad (ii), pero no la localización o color (i); cuadrados en cuyo caso se distingue tanto (i) como (ii); triangulares, que con aquellos en los que se distingue (i) excepto en el caso del fonema más abierto.
El rasgo de localizacion (i) puede distinguir de dos maneras:
a) Entre vocales posteriores, donde la lengua se vuelve hacia el velo del paladar alargando la cavidad bucal (estas son graves: el formante es relativamente bajo) y anteriores en las que la lengua va hacia el paladar, acortando o dividiendo la cavidad (estas son agudas: el formante es relativamente alto).
b) Entre labializadas que implican el redondeamiento de los labios (y el descenso del segundo formante, de ahí que les se diga 'bemolizadas') y no labializadas caracterizadas por la retracción de los labios y la subida del segundo formante (por eso sostenidas).
En latín, ruso y japonés tiene lugar un sistema triangular:
u i
o e
a
que distingue tres grados de abertura y en dos de ellos la posición de los labios, mientras que en el máximo de abertura no.
El número de grados presentes en el sistema del árabe clásico, en cambio, es de dos, siendo también triangular:
u i
a
En el caso del griego medio se distinguen tres grados de abertura cuyo nivel mínimo distingue tres clases a su vez de timbre, dos en el medio y no distingue en el máximo de abertura:
u ü i
o e
a
i: la localización (de la articulación) o el timbre (color).
ii: el grado de abertura o la densidad o difusión (acústica) .
iii: la nasalidad que da una resonancia suplementaria
Los 'sistemas vocálicos' pueden ser lineales si es que se reconocen diferentes grados de abertura o densidad (ii), pero no la localización o color (i); cuadrados en cuyo caso se distingue tanto (i) como (ii); triangulares, que con aquellos en los que se distingue (i) excepto en el caso del fonema más abierto.
El rasgo de localizacion (i) puede distinguir de dos maneras:
a) Entre vocales posteriores, donde la lengua se vuelve hacia el velo del paladar alargando la cavidad bucal (estas son graves: el formante es relativamente bajo) y anteriores en las que la lengua va hacia el paladar, acortando o dividiendo la cavidad (estas son agudas: el formante es relativamente alto).
b) Entre labializadas que implican el redondeamiento de los labios (y el descenso del segundo formante, de ahí que les se diga 'bemolizadas') y no labializadas caracterizadas por la retracción de los labios y la subida del segundo formante (por eso sostenidas).
En latín, ruso y japonés tiene lugar un sistema triangular:
u i
o e
a
que distingue tres grados de abertura y en dos de ellos la posición de los labios, mientras que en el máximo de abertura no.
El número de grados presentes en el sistema del árabe clásico, en cambio, es de dos, siendo también triangular:
u i
a
En el caso del griego medio se distinguen tres grados de abertura cuyo nivel mínimo distingue tres clases a su vez de timbre, dos en el medio y no distingue en el máximo de abertura:
u ü i
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